1.- Sustituye cada subrayado por una palabra o varias palabras más precisas y adecuadas
El que escribe hace una descripción de las cosas que hay en el campo. Primero habla de la línea de las montañas. Luego se fija en una iglesia con muchos años que está arriba de la montaña. Está con pocas piedras.
2.- Sustituye cada subrayado por una palabra o varias palabras más precisas y adecuadas
María veía fijamente la hermosa luna redonda, que parecía ir por un cielo sin nubes. Le vino a la memoria que muchas veces hacía lo mismo cuando era pequeña. La luna era entonces un ser muy malo, ya que todos los cuentos y leyendas que le decían eran por la noche y bajo los ojos de la luna: cosas de muertes provocadas, de animales que cogían sangre, de brujas que iban encima de una escoba, de enterradores que iban en carretas, de hombres que iban por las calles en busca de niños.
3. Sustituye cada subrayado por una palabra o varias palabras más precisas y adecuadas
Juan hizo saludos de manera normal a los que le hacían gestos de amigos. Se puso en la barra y pidió con energía un vino. De lado vio con atención que unos hombres, a los que no conocía, le perseguían con la vista. Decidió hacer ver que estaba con alcohol dentro. Habló trabándose, se movió mal y se fue a la puerta de la calle. Una vez fuera, se fue entre la niebla.
4. Sustituye cada subrayado por una palabra o varias palabras más precisas y adecuadas
He aquí los hechos, los diré rápido. Don Alejandro era el jefe de la empresa, un establecimiento que estaba en la frontera con Brasil. Su padre, que era de Aurbeen, se había fijado en este lugar cuando era a mediados del siglo de antes. Trajo consigo unos cien libros, los únicos, me atrevo a decir, que miró en toda su vida. Al principio nos trataba bien, pero con el tiempo, ya mayor, empezó a dudar de todo el mundo. Hablara en voz alta o hablara en voz baja, siempre decía lo mismo: “Me quieren quitar las cosas, quieren matar a mi familia, quieren hacer suyo mis cosas”
5. Sustituye cada subrayado por una palabra o varias palabras más precisas y adecuadas
El otoño empieza el 3 de septiembre y termina el 22 de diciembre. El caer de las hojas, la huida de los pájaros y la bajada de las temperaturas son tres cosas de dicha época. En los bosques el suelo se llena de hojas secas y la floja luz del sol casi no pasa los brazos de los árboles. El escritor Ignacio Gorina dijo en un escrito: “En otoño una parte de nosotros mismos pierde vida junto a los vegetales y otra va junto a los seres que vuelan.
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